Fernando Villegas se reconoce como un fanático de los trenes, “un tema que le hace saltar lágrimas” como lo dijo en el capítulo del 25 de junio de Tolerancia Cero, donde era interpelado el precandidato del Frente Amplio, Alberto Mayol.
Ahí el sociólogo sostuvo que “veo una locomotora y me pongo a llorar poco menos, me encantan los trenes. Pero hay un problema, la molesta matemática y los cálculos”.
Claramente hastiado por las propuestas de Alberto Mayol, Villegas sostuvo que “había un tren al norte efectivamente, incluso había un ramal, un tren de pasajeros que se llamaba El Longino, que algunos ancianos lo recordamos, y desapareció, pero no desapareció porque como dice Fernando, de la noche a la mañana emergieron unos camioneros que no existían y comenzaron a hacer lobby, y si es que acaso lo hicieron, es porque estaba debilitado ferrocarriles”.
El chascón panelista de Tolerancia Cero, añadió que “cuando se empezó a desarrollar la industria del ferrocarril en Inglatera a partir de la invención de Stephenson y todo lo demás, había una inmensa y centenaria industria de carruajes. Los criadores de caballos, los ebanistas, los que hacían los carruajes, era una cosa gigantesca, e hicieron una enorme presión en el parlamento británico y no resultó porque se toparon con un método alternativo que era superior y por lo tanto todo ese lobby se estrelló contra un muro”.
Villegas agregó además que “En Chile en cambio, estos datos están en la historia de Ferrocarriles del Estado, que hay varios libros sobre eso, este era el tren con la mayor cantidad de trabajadores por kilómetro de línea férrea del planeta. En otras palabras, como empresa estatal fue sobrecargada -como pasa con Codelco- de trabajadores, de gastos absurdos, de mala gestión y evidentemente llegó un momento en que era inviable económicamente y se empezó a desarmar y ahí saltaron además los camioneros efectivamente”.
Siempre dirigiéndose a Mayol, Villegas sostuvo que “lo que te quiero decir es que la idea del tren, que también le fracasó a Lagos hacia el sur, donde hay mucho más mercado que hacia el norte, muchas más ciudades, fracasó. Lo reventaron y efectivamente hubo además chorreo y choreo. Ya que te interesa tanto el tren al norte, al Gran Vitesse, llamémosle así, tú has hecho estudios de una cosa que es esencial para estos proyectos y que es el que ha impedido y siempre impidió el trayecto nuevo de Santiago a Valparaíso que estamos hablando solamente 100 kilómetros en línea recta, -la propuesta de Piñera, interrumpe Mayol- no, no esta propuesta viene de mucho antes, Alberto, es más vieja que tú y nunca funcionó. Porque habían unos personajes pesados que hacían cálculos con la regla de cálculos en esa época y demostraban que no era viable y que iba a ser un agujero de fondos como ya era Ferrocarriles en los demás ramales.
Villegas continúa diciendo que “entonces, uno no puede llegar y plantear un proyecto de ciencia ficción de un tren gran vitesse que recorre regiones peladas, con ciudades pequeñas y que no hay mercado y que son atendidas ahora por el avión, y decir tranquilamente que esto va a costar 15 mil millones y no sabemos cuánto más va acostar la línea paralela de carga. A mí me parece un poquitito fantasioso, perdóname que te lo diga, porque los números no dan, no dan para un tren de gran velocidad que es lo más caro que hay, aunque no vayan a 300 kilómetros por hora y que vayan a 200, son carísimos. La verdad es que en todas partes, en Francia son subvencionados, en China que acaban de construir un ferrocarril gran vitesse, es totalmente subvencionado por el Estado, entonces ¿No te parece que hay otras cosas más prioritarias y más urgentes?
Ante esta gran introducción el candidato Mayol respondió primero sobre la “molesta matemática”, asegurando que hay “elementos estratégicos, temas incluso geopolíticos. Los aviones producen viajes y los trenes no sólo producen viajes, sino que producen y construyen países, vertebran una columna para la estructura de un país, establecen donde va a crecer la población, establecen criterios porque ahí donde se pone una estación va a haber más posibilidad de que aumente la inversión privada y aumente la cantidad de personas que van a vivir. No hemos ocupado el sistema ferroviario, ni siquiera el Metro, ni en Santiago ni en regiones, no lo hemos ocupado para diseñar, lo hemos ocupado para seguir lo que hacen los sistemas ferroviarios en las ciudades”.
Mayol continuó con su respuesta diciendo que “queremos ocuparlo al revés. Va a generar turismo en el sur, el Tren Patagónico va a ser un éxito mundial, con capacidad y capilaridad en los territorios pequeños”.
El candidato agrega mirando a Villegas que “lo que tu planteas es que no vamos a poder hacernos cargos de este gran monstruo que estamos generando y nosotros decimos que va a ser una base del desarrollo del país. Construir el tren, no comprar el tren. Los chinos hicieron eso, no sabían hacer trenes, contrataron ingenieros que sabían y construyeron un tren. Un tren no muy complejo como este, de 200 por hora, construyeron y aprendieron a hacerlo, a repararlo, aprendieron la tecnología, vertebraron sus universidades, produjeron hasta 60 mil empleos directos en cada región. Va a permitir asociarlos a los CFT estatales y va a permitir vertebrar el país, inversión pública importante, desarrollo con plata que ya está en Chile, que no genera inflación, no llegan créditos extranjeros. Cuál es el gran problema de la gran obra, es planificación. Se hizo en el siglo XIX, no fue un desastre, Chile no quebró y se puede hacer ahora”.
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